Esta aldeana nació en una familia humilde que tenía otros dos hijos más. Ya desde muy joven se dedicaba a cavar las huertas una vez que estaban sembradas. Una vez casada, se tuvo que marchar con sus hijos a una finca llamada ‘El Yezgo’, donde vivió durante 13 años al cuidado de la finca. Después volvió a su pueblo, Aldea del Rey, donde siguió desempeñando labores agrícolas y cuidando a sus hijos. Una vez fallecido su esposo, María Josefa vivió con su hermana hasta que falleció. Ahora ha cumplido cien años junto a su hija Antonia, quien la cuida en la actualidad y donde celebró su centenario.
Fdo. Gabinete de prensa del Ayuntamiento de Aldea del Rey - Oretania