Y EL PATRÓN DEVOLVIÓ EL SALUDO...

El año pasado, cuando Nuestro Patrón recorrió las calles de su pueblo se produjo un detalle que, tal vez, pasó desapercibido para muchos aldeanos. La Hermandad de San Jorge, al pasar por delante de la Ermita de Ntra. Sra. del Valle, obsequió con un ramo de flores a la Hermandad de la Patrona.

Quiero aprovechar para dar las gracias a la Hermandad de San Jorge por haber tenido este detalle, a modo de Hermanamiento con la Hermandad de Ntra. Sra. del Valle. Fue un ejemplo de caballerosidad y la idea partió de una persona... Si bien el mérito y el reconocimiento por lo bonito de este acto quiero hacerlo extensivo a toda la Hermandad, sería injusto no reconocer al impulsor de la iniciativa, ese hombre fue mi amigo, Santos Alcaide Mora; siempre trabajador, siempre humilde, siempre ilusionado por las cosas de su pueblo y, sobre todo, por su Patrón...

Quiero dar las gracias a Santos, a su familia y a la Junta Directiva de la Hermandad de San Jorge Mártir porque fue un pequeño detalle, muy grande para algunas personas y, esos pequeños detalles, son los que hacen grandes las cosas. Todo lo que sea buscar la unión entre Hermandades, la colaboración, trabajar en positivo en lugar de criticar, merece mi total apoyo y reconocimiento.

Muchas veces he escuchado a otro gran amigo mio, Jesús Molina, Secretario de la Hermandad de Jesús Nazareno, hablar de que sería muy positivo para el pueblo crear una Comisión de Hermandades, disculpadme porque no sé si fue esa la palabra que utilizó exactamente, a fin de conseguir una mayor relación entre las mismas, unir fuerzas, desarrollar actividades o iniciativas conjuntas, etc... Pienso que es una gran idea que podría dar muy buenos frutos a Aldea del Rey y evitaria muchas situaciones que pueden darse lugar cuando no hay una comunicación fluida.
Este año, no sé si podrá volver a repetirse ese momento pero, pase lo que pase, ese detalle siempre quedará ahí... y, cuando el "Gran Soldado" llegue a la altura de la calle Ermita, Nuestra Señora del Valle estará ahí, mirándolo, como el resto de Aldeanas y Aldeanos que lo siguen en Procesión, y Nuestro Patrón volverá la vista, disimuladamente, para rendirle honores como la Madre del Dios por el que vivió y murió, y decirle con su gesto; "-Madre... hasta el 8 de Septiembre...-"

Fdo. José Pablo Molina